No ha ido al cine para quedarse a dos velas. Dante Colle esperaba que estuvieran a oscuras, en un rincón, poder meterle mano a su chica Haley Reed, hacer guarradas juntos. Sabe que es un tio muy sexual, pero a ella en cambio le cuesta mucho dar le paso y más en un sitio público. Dante apenas mira a la pantalla, sólo piensa en buscar la forma de que ella al menos le toque la polla y se la pele.
Un agujero bien hecho en la base del bote de palomitas, su rabo apareciendo entre los copos tostados. La invita a probar unas cuentas. Ella ve ese pedazo de rabo y se anima, mete la mano dentro y se la coge del revés. La cara de Dante es un gustito extremo. Enseguida se hace la modosita y deja de tocársela. Dante se queda en su asiento, con la polla metida en el bote de palomitas y los pantalones bajados hasta los tobillos.
De repente una mano se posa en su trasero desnudo, se lo soba y un dedo juguetón se interna por la raja acariciando la entrada de su ojete. Primero sorpresa. Mira a su chica, pero tiene las manos entrelazadas. Mira hacia atrás y se encuentra a un santo varón que le vuelve loco. Malik Delgaty se ha arremangado la camisa. Les estaba espiando desde atrás. No piensa dejar que a un tio le dejen con las ganas y piensa encargarse de ello.
El puto gustazo que siente Dante le supera. Está a punto de no poder aguantarse las ganas. Alguna vez su chica ha llegado a lamerle el culete, pero nunca ha llegado a meterse dentro de él. Mira a Malik y le asiente con fuerza con la cabeza, le hace un gesto con la mano, con un dedo hacia arriba sugiriéndole que la meta más adentro y más rápido. Malik responde dándole lo que desea y también asiente mordiéndose el labio y apretando la mandíbula, cogiendo su culo con fuerza.
Un chorrazo de leche sale despedido hacia arriba y se deja la lefa en las palomitas. De momento prefiere mantener eso entre hombres sin contarle nada a su chica y le cuenta que va un momento al baño. Malik ocupa su lugar en el asiento, mete la polla por el agujero del bote y coge la mano de Haley para que le haga una paja. Ella ni se ha dado cuenta del cambio hasta que su chico aparece y descubre que le está tocando el rabo a un tio que no conoce de nada.
Los dos sonríen por la jugarreta que acaban de hacerle y ella acaba aceptando la broma, incluso se pone cachonda, pensando que quizá era eso lo que necesitaba en su relación a esas alturas, dejar entrar a otro en el campo de juego. Vuelve a meter la mano en el bote, alarga el otro brazo y se la coge a su chico. A mano llena les pajea a los dos a la vez. Las tienen largas, grandes y hermosas, muy parecidas.
Se quedan solos en el cine, a punto de convertirlo en algo más que una sala X. Se desnudan por completo. Ella sube las piernecitas al asiento, abriendo su coño, sin dejar de zarandearles esas pollazas. Malik le palmea la almeja. Está mojadísima. Por primera vez Dante echa un ojo a los atributos masculinos de Malik y le apetece tanto que se inclina y se la zampa de un trago. Malik le agarra fuerte del cogote y le folla la boca.
Cuando Dante vuelve a abrir los ojos, ve la cara de su chica a un palmo de la suya, ese pollón entre medias. Los dos se miran sin poder creer que iban a verse en una así, lamiéndo a la vez una tranca como esa, pasándosela de una a otro, chupándosela a un chulazo que está de toma pan y moja. Los dos chicos cogen asiento y ella elige la polla nueva para sentarse encima. Es super gruesa y le rellena todo el chochito. De vez en cuando Dante se inclina, Malik empuja el culete de Haley hacia arriba para sacar el pene de su coñito y deja que el chaval haga de mamporrero, preparándole la verga para volver a follarse a su chica sin condón.
Le brinda una follada por detrás a su chica a cuatro patas y disfruta viéndola con la boca llena. El falo de ese tio es gigantesco y bien guapo. Que lo disfrute la muy perra. La lujuria se desata entre los dos machos. A Malik le pirra el culazo de Dante, ya lo dejó claro al meterle mano antes. Ahora alarga un brazo y se lo toca, lo empuja, obligándole a follar más fuerte, más duro. Dante coge la polla de Malik y se la machaca, se inclina y se mete ese pito duro en la boca.
Malik coge el testigo y se la zumba duro por detrás. Luego entre los dos le dan de comer rabo. Ella también aprovecha para jugar, sabiendo que esos dos se molan. Les nutre las vergas con saliva y hace que se rocen una con otra. Le gusta ver ese contacto sexual entre chicos. Malik toma asiento, Haley le masturba la tranca y mira a su chico. Quiere ver cómo cabalga sobre un vaquero. Él también quiere saber lo que se siente.
De espaldas a Malik va haciendo una sentadilla. Una polla grande y dura le abre el ojete a pelo. Empieza a dar saltitos sobre la montura y su chica no pierde ripio, coge su polla, se la mete en la boca y luego coge asiento sobre sus piernas y se la mete en el coño. Dante deja los ojos en blanco de gusto. Un tio metiéndosela por el culo mientras él se folla a su pibita.
Dante termina tumbándose en el asiento al lado del pasillo con la parte baja de la espalda en el reposabrazos, abierto de piernas, deseando que ese machote se lo folle y le reviente el culo. Se fija en su cuerpazo musculado, en su cara de guaperas. Deja de verle cuando Haley se sienta en su cara y le da coño para comer. No para de menearle la polla hasta que se corre encima. Malik sale del culo de Dante, le da duro a la mancuerna y se corre en la carita dulce de Haley y la polla de Dante, entregando su leche a la parejita. Nunca la había visto volverse tan perra follando, tragando leche. Dante se queda tumbado, observando el cuerpazo de ese cabrón que todavía está delante de él con la polla bien empalmada. Buena la sesión de cine X.