A lo largo de todos esos años en MAP Records, Justin Jett había visto cómo artistas consagrados en la cima caían cuando comunicaban que eran gays, una parte como consecuencia de que todavía el mundo no estaba preparado para ver la realidad que les rodeaba y les daba miedo, otra bastante más razonable, consistente en que muchas chicas que se veían reflejadas en las letras de las canciones de amor y desamor del artista, ahora descubrían que no eran para ellas, sino para ellos.
Only Matt era tio de portada, de los que ya sólo por ver su cara y su porte, te comprabas el disco. La de tias que mojarían las bragas por él, la de hombres que se masturbarían hipnotizados por sus ojazos claros, imaginando esa barbita raspando las rajas de sus culos o su semen encima de ella. Las canciones serían lo de menos. Pero era obligación de Justin recordar que si lo lanzaban anunciando que era gay, se caería una parte del pastel.
La decisión de Matt fue importante. Prefería mantener su condición sexual en el anonimato, siempre y cuando se le garantizara que de puertas para adentro podría satisfacer sus necesidades. Dicho y hecho. No había papel donde pudieran firmar este acuerdo, pues el simple papel ya habría constituído una prueba, pero podrían llegar a un acuero verbal, uno que pasara por darse el lote en el estudio y follar.
Gay y con novio. A veces Justin se preguntaba cómo la gente era tan intransigente, cuando un tio así despertaba el morbo de cualquier ser viviente. El tio, además de apuesto, tenía un buen paquete. Justin no dejaba de mirárselo y Matt parecía darse cuenta pero permanecía sentado con las manos en los bolsillos, quizá esperando a que Justin diera el primer paso.
Y lo dio, dirigió sus manos al paquete y dibujó con ellas la marca de la polla grande y gorda por encima de los pantalones. Matt hizo lo mismo, la cosa se puso caliente y fue él quien cayó rendido entre las piernas de su productor comiéndole la polla. Justin se la devolvió con creces, jalándose su pito erecto hasta los huevos. Luego le dio la vuelta, le obligó a inclinarse sobre la mesa de mezclas, descubrió su tremendo culazo de macho y, con permiso de su noviete, se lo trincó a pelo, metiéndole un buen repertorio de pollazos.
VER MAP RECORDS: THE ARTIST EN MENATPLAY.COM
