Alex Ink penetra duro a Rudy Gram jodiendo bien a pelo su culazo de macho | Lucas Entertainment
Horny As Fuck
Un inocente juego entre amigos iba a pasar a mayores. A Rudy Gram le gustaban los pinreles de Alex Ink. Desde que tuvo conciencia del cuerpo masculino allá por comienzos de sus años de instituto, cuando visitó por primera vez los vestuarios donde ya no había niños, sino hombres hechos y derechos, aparte de comparar tamaños de rabo, su fetiche secreto y muy bien guardado hasta ahora habían sido los pies.
Que un tio calzara bien de abajo, le hacía tener la extraña idea en la cabeza de que entre las piernas debía tener una buena minga y pensar en esa idea le excitaba. Y, ¿por qué confiaba en que esa idea era cierta? Porque cuando se ponía tierno y se decidía por entregar su culazo a niñatos guapísimos y encantadores como Alex, siempre le era grato descubrir que no se había equivocado, que esos cabrones tenían el rabo bien largo.
Inclinar la cabeza hacia la entrepierna de ese chaval, besar su cipote y ver cómo brincaba de gusto el enorme pollón, Alex dejándose hacer, llevándose un brazo por detrás de la cabeza, enseñando su peludo sobaco, asistiendo al momento en que su largo pene desaparecía en las profundidades de aquella boca tragona. Rudy esperó a Alex, abierto de piernas para él en el sofá, mientras este iba a por un poco de lubricante. Verle andar desnudo, con la picha dando bandazos, con ese precioso culete meneándose, tan blanquito con respecto al resto de su cuerpo bronceado, hizo que el ojete dle culo se le abriera más todavía.
Alex le reventó a pollazos, encajándosela hasta los huevos y luego le protegió el culo por detrás subiéndose al sofá, empujando su pandero para meterla con fuerza. Los muslos de Rudy meciéndose hacia adelante, hacia atrás, cada vez que se la metía a fondo. Rudy se montó encima de Alex y aprovechó el momento feliz para regalarle un recital de lefazos, mojándole enterito, disparando leche a placer.