
[MEN] Tarzán Gay XXX Parte 2: Tobias descubre la magia del pollón gigantesco de Tarzán bajo el taparrabos
Tras muchos años alejado de la humanidad, desde que era un bebé, tanto que ni recuerda, Tarzán Diego Sans comienza a ver florecer sus sentimientos hacia otros seres humanos como él. El instinto de ayuda y supervivencia sale a su encuentro cuando ve a uno de los naúfragos atrapado en las lianas de un árbol, a punto de ser atacado por una de las serpientes más venenosas de la isla. Con una experiencia inaudita, consigue domar a la pitón como un encantador de serpientes y a continuación casi que hace lo mismo con su salvado Tobias.
Después de asistir a una follada entre los otros dos naúfragos, escondido entre los matorrales, descubre en ese otro ser a su alma gemela. Tiene una mano igual que la suya, un corazón que late en su pecho, igual que el suyo, unos labios que saben besar como los suyos. Tras una pequeña aventura corriendo entre árboles y saltando a unas cataratas, Tobias destapa el taparrabos del tio salvaje y descubre bajo él lo más grande de aquella selva, un pedazo pollón morenote, gordo y largo como un pepito de chocolate preparado para llevar y comer.
A lo mejor hasta tenía suerte y era el primer pibe que chupaba aquella delicia, por eso se recreó tanto cuando tuvo el principio de polla dentro de la boca. Era tan grande y quería darle tanto placer que tuvo que apañarse con una mano para cubrirla entera y enseguida le abrió su culito blanco para que se la metiese, seguramente su primer culo en la vida. Pensó que no sabría ni meterla, pero qué cojones, el instinto humano salió a flote de nuevo y vaya que si sabía por dónde tenía que colarla, un instinto tan arraigado como el respirar. Después de tantos años seguro que tendría los huevos cargados, así que se agachó y se quedó esperando con la cara preparada a que le regalase toda la leche.