
[Stag Homme] Damien Crosse se folla a David Avila en una playa en público en «Chernobyl»
Dos de los tios más salvajes y cerdos practicando sexo se juntan para brindarnos una follada histórica. Hemos podido verles antes por separado y tienen mucho en común, les encanta el sexo, comerse unas buenas pollas tragando con un vicio increíble como si se la fueen a quitar, de esto de rellenarse bien la boca e intentar tragárselas hasta presionar con los labios la base de los cojones aunque peguen unas arcadas por ser tan glotones, les encanta sentir el rabo enorme de un tio pollón dentro del culo y tragar y tragar sin descanso, su cara de vicio lo dice todo y les encantan las buenas acabadas, sintiendo los regueros de lefa inundarles la cara y el cosquilleo del semen resbalando por todo el cuerpo.
Cuando me enteré de que iban a estar a solas en una escena el corazón se me puso a mil porque he visto mucho de ellos, porque me encantan por separado y porque imaginarlos totalmente salidos disfrutando como locos, eso no podía ser sano. Sexo entre dos machos auténticos follando como animales, como nos gusta para ponernos perros. Y encima no se les ocurre otra que hacerlo en público en una playa.
David Avila va buscando tema por la zona, marcando musculitos y ataviado con un bañador corto de color rojo, echándose mano al paquete de vez en cuando marcando territorio y dando a conocer sus intenciones a cualquiera que pase por allí, presionando su polla que se va calentando a la vez que su imaginación, esperando encontrar algún tio con el que follar duro para empezar bien el día. En una zona en proceso de demolición, va en dirección a un tio tumbado tomando el sol que le está mirando de lejos y también se está tocando el paquetón y con gente pasando alrededor sin importarle una mierda, se ponen frente a frente y siguen dándose cancha a sus rabos bajo la tela, Damien Crosse se lo saca gordo por un lateral y se la masajea mientras ve a ese pibón de pie frente a él.
Damien Crosse termina sacándose la polla entera y se mete un pajeo con toda la gente más abajo y un chaval que se queda a mirar. Juntos se van a una zona más apartada llena de graffitis y David Avila se pone a cuatro patas como un perrito comiéndole la polla entera y limpiándole bien el sable mientras de vez en cuando pasa gente que se les queda mirando. Pero ellos siguen a lo suyo. Damien se planta de pie con los brazos detrás de la cabeza y deja que David se vaya rellenando la boquita con su enorme pollón mientras le desplaza los labios por cada centíemtro de su rabo, apretando fuerte y sacando jugo.
De tanto meneo y tanto vicio chupando sin dejarse nada, a David Avila se le empieza a ver el inicio de un precioso culazo grande y blanquito por debajo del bañador. En cuanto Damien ve esa rajita sobresaliendo, no puede resistirse a darle la vuelta, ponerlo de espaldas de pie contra él y bajarle el bañador por debajo del culo, rebozando y restregando su polla entre sus piernas por debajo, soñando con meter su palo dentro de esa zambomba hasta que salga lo que tenga que salir.
Damien se enfunda el preservativo y apunta bien, intentando encontrar la entrada dentro de ese tremendo culazo, hasta que la encuentra y empieza a follárselo. David ayuda sacando el culo hacia afuera para tragar mejor, con el pandero eleva y baja el culo metiéndole una pajilla que a Damien le vuelve loco y con tanto gusto, el calorcito que tienen, los gemidos y acoplado ya el uno en el otro, empiezan a gozar como dos machos salidos. Damien le mete una clavada tras otra sin descanso, estampándole la polla hasta los cojones y aprovechando el movimiento de sus caderas para impulsarla toda dentro y sentir el meneo de ese culo empolvado cada vez que lo embiste con todo el cuerpo.
Ya en otro lugar también abierto al público contra otra pared, David sentadito disfruta de una de las espectaculares mamadas de rabo de Damien, con sus labios apretaditos dándole un rápido repaso por todo el instrumento, sintiendo el aliento de su boca deseosa por todo su cipote lleno de saliva. Los dos no paran ni un momento y del calentón se ponen cabeza con cabeza a besarse mientras se pajean, dándose lametones, disfrutando de sus caras de vicio, comparando sus rabos mientras cada uno se mete caña al suyo.
Damien vuelve a agenciarse la polla de David y se la mete hasta las trancas, haciendo que el chaval le suplique y le diga que como siga haciendo eso se corre. Entre los dos se van turnando para comerse los rabos. Lo hacen con mucha fuerza y mucha hambre, dejando escapar unos gemidos bestiales cada vez que notan el capullo entrarles por las gargantas.
Como no podía ser menos de estos dos, el final es de auténtico vicio para los que nos molan los lefazos en toa la boca. David Avila se pone de pie y se pajea la polla mientras Damien Crosse espera impaciente pidiéndole leche con la cara encima. David se deja ir y empieza a echar lefa que le va saliendo a borbotones por la raja del pene. Damien logra atraparlo con la boca deslizando el rabo entre sus labios y hace una de esas guarradas que nos encantan, abriendo bien la boca y enseñando todo el pegote de lefa entre los labios. La escupe y la deja caer sobre el biceps de su brazo.
Rápidamente intercambian las posiciones y Damien Crosse le pega una corrida en toda la lengua a David Avila, que se queda con la lengua pegada en la base de su frenillo, disfrutando de la leche que le va resbalando y dando unas últimas caladitas con la lengua para atrapar los últimos brotes de semen que le salen por la polla. Una preciosidad la imagen de su cara de machote, la lengua por fuera mojadita y justo pegada a su cara un pollón enorme todavía duto empapado en leche. Con toda la pija todavía empalmada, Damien termina pegándose una meada.