Brock Banks y Valentin Petrov se hacen un flip-fuck sin condones | Chaos Men
De rodillas en la cama, Brock Banks no paraba de pensar que frente a él tenía a toda una leyenda. El mismísimo Valentin Petrov le estaba comiendo la boca y de tanto intimar se le había puesto dura. Brock la había visto tantas veces en la pantalla de su ordenador que estaba deseando comprobar si en realidad era tan grande como parecía en las escenas que veía entonces.
Metió una mano por debajo de sus bermudas y se llevó una grata sorpresa. No sólo cumplía sus expectativas, sino que las superaba por completo. Desnudo, comiéndole la polla a ese cabrón, mientras este le sobana el culazo deseando metérsela, pudo comprobar que la fama de Valentin estaba bien ganada a pulso. Esa polla larga, gorda y dura era la de un caballo ganador.
Fue una puta locura cuando Valentin se puso encima de él para hacerse un sesenta y nueve, cuando vio venir ese culazo y toda esa dote hacia su cara. Todo para él, a disposición. A Valentin también le gustaba chupar pollas. Cuando Brock quiso darse cuenta, le colgaban las babas de ese macho hasta por debajo de la bolsa de los cojones.
Qué placer le dio tener toda esa pirula, completamente desnuda, un buen cilindro perforando su ano sin condón después de que Valentin se lo trabajara a base de saliva y lengua. Por suerte para Brock, ese día Valentin estaba generoso y también se dejó follar. Brock casi no podía creer que se estuviera follando al tio con el que tantas veces se había pajeado. Para acabar la fiesta, le metió un dedo por el culo y hurgó mientras Valentin se sacaba la paja de ese pedazo de pollón y se corría encima.