El guapísimo rubiales de ojos azules Ben Trafford se desnuda por completo y se hace una paja lechera en la camita | Bel Ami Online
El terror de los nenes. Guapo, alto, de cuerpo atlético y musculoso, rubio y ojos azules. Ben Trafford tiene todos los ingredientes necesarios para que cualquier tio sienta interés por él. Y sí, también la tiene larga, muy larga y los huevos le cuelgan entre las piernas de tal forma que, cuando las separa, le llegan casi hasta el ojete, un precioso agujero protegido por unos inusuales pelazos negros.
La imaginación vuela cuando uno se imagina encima de él, penetrándole, mirando sin descanso esos ojazos claros, dándole placer mientras gime y le echa el aliento, sintiendo el empinamiento de su polla frotándose contra tu vientre cada vez que se la metes bien ajustada en el hueco. Y cuando te separas un poco ves esa fina hilera de precum entre tu y él, uniéndoos a los dos.
Tumbado bocabajo, Ben no tiene remedio. Es un puto caramelito a la puerta de un colegio. Su espalda, sus piernas, su culazo de futbolista. Entrar por la puerta y encontrárselo así desnudito sobre la cama, hace que cualquiera pierda los pantalones y, con ellos puestos todavía por los tobillos, subirse encima de él y follarse a ese bombón como un perro propasándose con ese culito de querubín.
Así bocabajo separa un poco las piernas, eleva el culete para ti y entonces los cojones salen a la luz, haciendo que se te disparen las pulsaciones y que desees rematarlo a fondo. Ben se da la vuelta y se hace una paja. Le gusta masturbársela con la mano completa. El rubor acude a su bonita cara cuando está a punto de correrse y no la abandona cuando bufa de gusto mientras suelta una lluvia de esperma sobre su cuerpo y el colchón, corriéndose como una fuente, disparando fuerte y alto.