[Lucio Saints] Jordi Moreno el chaval de City Boys se pajea su grandiosa polla
Si le ponemos un poquito más de pelo y algo más desordenado, apagamos un poco las luces y lo sentamos sobre la versión maligna de color oscuro del famoso sofá blanco de LucioSaints.com, seguro que lo reconocéis. Se trata del chaval que aparece en el segundo episodio de la serie City Boys, pajeándose junto a otro tio viendo una peli porno gay en una de las salas, cuando Allen King entra. Cuando le vi en el trailer me dije «joder este tio me suena un huevo» y apenas tardé unos segundos hasta que me inundó una enorme ilusión al descubrir que se trataba de él, porque me había gustado muchísimo.
Otra forma inconfundible de descubrir quién era es su larga, gorda y apetitosa polla, la misma que, para los que no os diéseis cuenta, aparecía en el glory hole del mismo episodio de City Boys, exactamente el pollón que queda a la derecha de la pantalla, cuando Allen King se come las cuatro vergas en la cabina del Boyberry de Madrid. El chaval se llama Jordi Moreno y tiene un punto que me vuelve loco, la carita delgada y guapa que casi parece el prota adolescente de una serie americana, el corte de pelo y una mirada preciosa, entre seria y melancólica como la de un cachorrito, muy interesante.
En la mini entrevista que precede a la escena que se marca a solas sobre el famoso sofá de los nuevos talentos, declara que su orientación sexual es gay y le encantan los chicos pasivos muy jovencitos, delgados, que se sepan mover bien y con una buena polla, vamos, que le apaña eso de que su gordo pollón quede bien apretadito en un culo.
Estaba deseando volver a verle y llega como caído del cielo. Es ver cómo se saca el rabo gordo por el lateral de las bermudas y es que mi polla responde a la par. La tiene super gruesa, larga, de una buena pieza hasta llegar a los últimos seis o siete centímetros, donde se curva ligeramente hacia la izquierda, mucha piel para disfrutar pajeando y comiendo y, para rematar, está acompañada de un buen par de cojones tan gordos como su nabo. Da gusto ver cómo la agarra con tres dedos por la parte de abajo y el pulgar arriba, descapullándose el glande, la piel que se queda como pegadita al lubricante natural de su cipote y baja lentamente por el tronco, ayudada por los dedos, dejando al aire un pedazo capullo con una raja escupe leches de la hostia.
De pie y totalmente desnudo, la cámara coge el ángulo perfecto para que olisqueemos su rabo, desde abajo, y podamos disfrutar de todo su esplendor, un culito con una buena raja, los huevazos y la polla que no para de apretarse bien, haciendo que su capullo casi eclosione cada vez que arrastra la mano hacia arriba desplazándola por esa barra gigantesca. El cuerpo de Jordi Moreno es muy normalito y eso le hace más interesante todavía. Está delgadito pero no tiene una tableta de chocolate, tiene unos brazos fuertes sin grandes biceps, pero está buenísimo, ya no sólo por su cara y su polla, sino por una piernazas irresistibles.
Verle de lado con la picha colgando y apuntando toda recta y dura hacia el frente y arriba, es un alucine. Casi podemos ponernos en el lugar de Allen King para saber por qué el tio no la soltaba. Menudo gancho tiene para agarrarse a él. Verle follar tiene que ser tremendo. Cuando ya lleva un ratito pajeándose, se calienta y empieza a meterse caña a la polla y a gemir a base de suspiros y respiraciones profundas, de la clase de tios que te están metiendo toda la tranca por detrás y se pegan a tu oreja haciéndote sentir que no sólo te están follando por el agujero, sino por todas partes.
En la recta final de su pajote, el chaval empieza a cascársela con rapidez y a soltar algún gemido que otro, un claro indicativo de que va a soltar leche en cualquier momento. A Allen King le puso perdido de semen, lanzando unos chorrazos por encima de su cabeza, plantándosela en toda la jeta e incluso en el pelo, pero ahora es nuestro. Os invito a que en el momento oportuno os situeis bien cerquita de la pantalla, os dejeis llevar por la cámara y disfruteis de unos buenos goterones de leche calentita y blanca cayendo encima hasta dejaros la cara llena de lefa.
Y atentos porque esta escena tiene un «behind the scenes» en el que Jordi Moreno se suelta la lengua… escuchad de su propia boca lo que más le gusta de un tío.
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