[UK Naked Men] Guillaume Wayne le mete su enorme polla francesa a Josh Milk
Dice la leyenda que los franceses saben hacer mejor el amor que cualquier otro ciudadano de un lugar llamado Mundo, que son los mejores amantes porque saben cómo besar y cómo darlo todo en la cama, ardientes y con mucha pasión. A mí vaya por delante que prefiero a los italianos, pero que después de los italianos, efectivamente a quienes veo más para mi estilo es a un tio francés guapete que tenga una bonita mirada y un cuerpo para ponerse a silbar encima del andamio.
Josh Milk debe haber escuchado tantas veces esta famosa leyenda que, como un pequeño pícaro, aprovecha la oportunidad que le brinda el destino para seguir hasta su guarida a uno de estos zagales. La guarida es una sala llena de andamios de madera y pintura donde el chaval se está quitando toda la ropa para ponerse el mono de trabajo, para ponerse mono del todo, vamos. La verdad es que quitarse la camiseta está bien, incluso los pantalones es algo normal, pero lo que ve por la ventana Josh debe dejarle relamiéndose los labios, cuando el tio se quita los calzoncillos también y se saca la escopeta, así curvadita como un plátano hacia abajo. Qué necesidad de quedarse en pelotas machote!
Para colmo el mono de trabajo es semi transparente y muy fino, lo que hace que se le marque todo el pollón en la zona íntima. Guillaume Wayne, que así se llama el pintor de brocha gorda, ya se había percatado de la presencia de Josh ahí fuera, así que le abre la puerta, se baja la cremallera y justo en la parte más baja se saca la porra que deja a Josh Milk con un hambre inmensa, con sus ojos de mirada preciosa observando el tamaño antes de probarlo con la boca. Todo guapetón se aplica al cincel y no lo suelta, llenándose todos los carrillos de polla.
El pollón del francés no para de crecer hasta que la tiene completamente dura, perfecta para enfilar un buen culo y partirlo en dos. Antes de eso Josh no para de chupar y pringar de saliva, de cogerla con una mano apretando bien con los dedos y metérsela dentro de la boca de lado, inflándose el moflete y después conduciéndola por presión hacia la salida como si se estuviera comiendo un polo en verano. Aprovechando el mono que justo cae con el inicio de la cremallera entre sus piernas, Guillaume acopla todos los cojones y se los saca por encima.
Guillaume está fuertote el cabrón y además con una pinta de macho impresionante, un tipo duro. Brazos larguísimos y fuertes que no dudan en agarras a Josh Milk haciéndolo suyo, con una mano y un brazo lo coje por detrás introduciéndose por la raja de su culo mientras con la otra mano le casca un buen frotamiento de paquete. Josh ya iba preparado para buscar tema, con unos slips ajustados y abiertos por detrás dejando el culo al aire. Anda que no sabe ni na.
Los dos se quedan pegándose un buen saludo con las manos uno en la polla del otro hasta que Guillaume se decide y baja a mamar el pedazo rabo que Josh le tiene preparado. Un buen comedor de pollas y burro que me pone cuando saca la lengua con esa cara de machote guapito. Aún le queda trabajo con la lengua con el culazo de Josh Milk, poniendo la cara de todas las formas posibles para poder introducírsela dentro y lubricárselo. Durante un rato Guillaume lo tiene rabiando por que se la meta ya. Le mete un dedo por el culo mientras el dedo índice le roza sin querer las pelotas y después le frota la polla donde antes estaba el dedo, antes de enfundarse el condón sumergirse dentro de su agujero de una forma apoteósica. Brillante cómo entra cada centíemetro como si le costase, todo apretadito.
El frotamiento entre los dos debe ser la hostia y Guillaume no para de machacarle pegándole culazos. Hay pollas que a simple vista no parecen grandes pero cuando estás delante aprecias sus verdaderas dimensiones. La del francés es muy grande y es toda una gozada ver cómo sale toda larga y gorda del culo de Josh y lo vuelve a penetrar estampándole las caderas en los globazos del culo.
La postura que me mata está fraguándose. La vi por primera vez en mi vida en la peli «Echoes» de Chi Chi LaRue, la primera peli porno que vi, así de sopetón en la primera escena y me dejó loco. Aquí vuelve a suceder y parece una repetición casi fiel en unn entorno distinto. Guillaume tumbado y Josh ensartándose encima, subiendo y bajando el culo pajeándole la polla y ligeramente tirando hacia atrás para que el tio se la vea mientras se lo folla. Con todo el trabuco dentro Josh debe estar flipando, pero el francés también debe estarlo admirando su rabo gordo engullido una y otra vez.
Josh no se queda a medias e intenta completar todo el recorrido hasta la mismísima base, que ya que cumple su sueño con una leyenda de este calibre, qué menos que comérselo todo. Josh se queda acurrucado, pegándole el meneo con el agujero del culo en toda la polla y Guillaume eleva la espalda para besarle y sentir de cerca sus gemidos. A Cuatro patas en el suelo, Guillaume coge posición de sentadillas y le empotra por detrás. Resiste como puede el empuje de ese macho que le cubre y le tiemblan hasta las piernas, una buena enchufada a un culo tragón.
Boca arriba, Guillaume le sigue enchufando el rabo y Josh Milk aprovecha esa postura para pajearse a gusto y correrse echándose toda la lefa encima mientras siente aún el gusto de esa polla penetrándole. Si algo no falta en el taller de un artista es la pintura. A Josh le gusta rica en toda la cara y degustarla, además esta vez conn sabor francés, una comida deliciosa. Guillaume se arrodilla pajeándose encima de la cara del chaval y en un par de pajeos ya le está soltando toda la leche que sale de su rabo a goterones, impactando sobre la barbilla y la boca de Josh que los recibe con gusto con la boca abierta y la lengua por fuera. Con toda la barbita pringada de lefa y también cayendo por el cuello, Josh se vuelve a llenar la boca saboreando el rabo descargadito. Es estupendo poder disfrutar de él así de guapo y mojadito, rezumando leche por toda la boca.
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