
[MEN] Damien Crosse y Denis Vega se follan el uno al otro en el regreso de «Men In Ibiza 5»
Lo bueno siempre regresa. ¿No os ha pasado más de una vez eso de estar contando los días que quedan para volver a ir de vacaciones al lugar donde tan bien lo pasaste años atrás? De repente vienen a la cabeza los buenos momentos y esa amarga sensación de la despedida y por arte de magia todo se vuelve maravilloso ante la idea de volver a reencontrarse con viejos amigos. «Men In Ibiza», serie creada por el estudio español Alter Sin, tiene el honor de ser una de las primeras series de la productora MEN.com en renovar por nuevos capítulos, rompiendo así con los cuatro episodios que venían teniendo cada una y agregando dos más a su cosecha (también lo ha hecho «Stepfather’s Secret» que va por su séptimo episodio). Y nosotros encantados, por supuesto, porque lo estábamos pidiendo a gritos.
Para marcar el regreso, nada mejor que comenzarlo con uno de los actores con los que acabó, Denis Vega. Paddy O’Brian, que había protagonizado los cuatro anteriores, deja paso a otros actores de la talla de Damien Crosse para permitirnos ver una follada impresionante con sabor gitano y latino en la que no hay ni top ni bottom, o si lo queréis ver de otra forma, hay dos top y dos bottom, porque los dos follan y se dejan follar y además con auténtica ansia.
Ibiza no es sólo parajes naturales y de ensueño, Ibiza también es fiesta, y a altas horas de la madrugada, cuando media peña ya está más con un pie en la cama que en la calle, algunos van buscando tema, con ganas de poner la guinda final a una noche de locos. Basta con un encuentro con otro tio en los baños que no para de lanzar miradas, para que sobren las palabras y el lenguaje corporal hable por sí solo. Una búsqueda tan complicada como interesante, cuando intentas buscar en el otro chaval una especie de confirmación de que le molas, algún gesto que te haga dar el siguiente paso.
Allá donde casi nadie pueda molestarles, lejos del sonido de la música, frente a frente, Denis Vega sucumbe a los encantos de la mirada y la voz profunda de Damien Crosse, al que es imposible resistirse. El tio lo entrega todo, caliente, besos con lengua, explorando todo lo que le gusta a un hombre que le hagan, sabe cómo y dónde lo hace. Le lame todo el cuerpo a Denis casi a bocados y se detiene olisqueando el paquete bajo los pantalones. Cinturón, botones, manguera por un lateral de los calzoncillos y toda dentro de la boca como un flan de gelatina, dispuesta para que haga magia y la convierta en un buen turrón duro.
Aguantar una mamada de Damien Crosse no es nada fácil. Los continuos cabezazos que pega, la succión, lo mucho que le gusta empitonársela hasta la mismísima garganta posando sus labios sobre tus huevos y atrapándotela entera y ya el sonido que hace al tragar y chupar, es para salir vivo de esa como auténticos campeones. Aunque se la come como él sabe hacerlo, se entretiene más en el capullo gordo y brillante de Denis, rechupeteándoselo como un chupa chups. Con todo el saborcito a polla en la boca, sube hacia su compañero y le busca para darle unos besos con lengua y que disfrute de su propio sabor a rabo. Me encanta ver a Damien como un perro enrabietado de perfil, meneando la lengua y enseñando los dientes blancos y perfectos.
Hora de devolver el favor de macho a macho. Denis se agacha, Damien se la saca de los gayumbos y sale toda victoriosa su polla ya gorda, larga y dura por completo, directa para que una boca la encierre entre sus labios y no la suelte. Denis no para de darle cera y divertirse con esa porra tiesa, se la coge con la mano pajeándola mientras ladea la cabeza y le come los huevos, sin sujetársela con las manos, haciendo que cuando le succiona de uno y otro lado, el rabo potente viaje de igual manera de un lado a otro rebozándose por su nariz y su cara.
Damien nos regala una preciosa imagen de sus mejores atributos. Sobre un banco, eleva una pierna y deja todo su portentoso culazo abierto. Por debajo le cuelga la polla gruesa que Denis ya se encarga de ordeñar a la vez que le come todo el agujero. Casi siempre habíamos visto a Denis dejándose dar, imaginando como quedaría su rabo en un buen culazo a su medida. Me encanta ver cómo se la mete a Damien, un auténtico toro empotrador, bufando de gusto mientras menea el culo y se la empaca.
Pero a Denis lo que más le mola es que le den fuerte con la polla por el culo, se pone a cuatro patas sobre el sofá con el culo en posición y Damien no tarda en marcarse una de sus folladas, inclinándose sobre su cuerpo y metiéndole de reventadas dejando caer el peso de las caderas. Denis se encabrona con un pedazo rabo dentro de él y eso nos encanta, la cara de rabia que pone pidiendo más, cómo estira la mano para abrirse más el cachete del culo y sentir cómo le inunda hasta el fondo, agarrando la cara de Damien por detrás y haciendo que le chupe el dedo.
Como ve que la manita no para quieta, Damien termina cogiéndosela y haciendo que le agarre del collar como a un perro. Eso parece que le pone cachondo y se la mete más rápido. Empapados en sudor, Denis se tumba en el suelo y pone el culo hacia arriba abriendo las piernas con esos muslos que apetece agarrar. Damien se pone en posición para atacar y le mete la polla enfilada de arriba a abajo como una estaca mientras el chaval se pajea con el puño cerrado sobre su rabo. La sensación de tener a un tio así desplegado todo para tí es estupenda, musculoso y con un culazo atrapapollas.
Con la enculada que le está pegando, consigue que el chaval se saque un poco de leche, Damien se la coge con la mano, se la reboza y se lleva los dedos a la boca para degustar el semen. Le saca la polla, le enchufa dos dedos dentro del culo sustituyendo a su polla y disfruta de las vistas de Denis pajeándose para corrida. Entre los dos hacen una competición de pajas y Damien es el primero en correrse, se pone de pie y empieza a lanzar escupitajos de lefa a un lado y otro que van cayendo sobre el cuerpo de Denis. Con toda la lefa encima, Denis se levanta y ahora es Damien Crosse en que espera como un cerdaco con la boca abierta a beberse la leche de su nuevo amiguete.
La recibe como a él y a todos nos gusta, con todos los chorros inundándole la boca por dentro y pringándole los labios y la barbita, con el semen cayendo y goteando de ella. Es un cabronazo y sabe que nos pone perros cuando lo hace y lo vuelve a hacer, reteniendo el semen dentro, dejando que veamos cómo menea dentro la leche calentita y después dejando que salga por su boca como papilla toda de golpe cayendo al suelo y dejándole un rastro de lefa en toda la cara. Anda que no nos gusta ni na ver cómo expulsa leche un buen rabo y a otro comérselo todo y pringarse bien!